La Biología floral o
ecología floral es la ciencia que se ocupa de investigar la
variedad de fenómenos que se producen en la polinización de
los espermatófitos. |
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Cleistogamia y casmogamia
La polinización puede producirse antes o después
de la antesis. El primer caso es la cleistogamia,
cuando la polinización se realiza ya en el capullo o botón
floral, la autogamia o sea la fecundación con las gametas del
propio polen, es obligada
porque las flores no se abren.
Su ventaja es que permite, a una especie
bien adaptada, perpetuarse en un medio más o menos estable.
Su desventaja es que por la autogamia, la especie presenta menor variabilidad hereditaria,
y pierde plasticidad evolutiva.
Hay plantas como el maní, Arachis (Leguminosa), y la violeta, Viola
odorata (Violaceae), que presentan
los dos tipos de flores: producen flores
casmógamas, y al
comienzo o al final de la floración presentan flores
cleistógamas, de tamaño, forma y color diferentes. En Viola
odorata las flores cleistógamas
tienen pétalos rudimentarios, y las
anteras son más pequeñas, con menor cantidad de polen.
La casmogamia es el proceso que ocurre
después de la antesis, en flores abiertas. En las flores
casmógamas puede tener lugar la autogamia o la alogamia,
polinización cruzada.
POLINIZACION DIRECTA - AUTOGAMIA
Cuando el transporte de polen, y por ende, la fecundación,
ocurre entre flores del mismo individuo, el proceso
se denomina autogamia. Está muy difundida entre
las malezas, las plantas pioneras y las especies insulares, que
necesitan la fructificación de individuos aislados. En especies
autógamas, las flores con frecuencia son inconspicuas, con piezas florales
reducidas, menor cantidad de polen, sin fragancia y sin néctar.
En las flores monoclinas o perfectas
o cosexuales, es posible la autofecundación, ya sea
por la acción de diversos dispositivos florales o por la
intervención de un polinizador.
En el lirio, Lilium martagon, el estilo
inicialmente erecto, se mueve curvándose para ponerse en contacto con los
estambres para autopolinizarse.
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Lilium martagon:
estilo móvil |
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Foto de Spencer C.H.Barrett |
En la achicoria, Cichorium intybus, las flores son protándricas, es decir que
el androceo madura primero; el estilo al crecer,
se carga de polen en su cara externa. Si no ocurre polinización
cruzada por medio de insectos, las ramas estigmáticas se
alargan y se curvan sobre sí mismas, poniendo en contacto su
superficie receptiva interna con el propio polen.
Autopolinización en
Cichorium intybus, achicoria |
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Esquemas modificados de Valla
1979 |
En Turnera orientalis, con
flores homostilas, cuando no hay polinización
cruzada por medio de insectos, ocurre la autogamia al marchitarse
la corola, porque los pétalos se juntan y retuercen poniendo en
contacto anteras y estigmas. Se forman frutos en ausencia
de polinizadores. |
Turnera orientalis,
flor homostila |
Flor marchita |
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En flores erectas, disciformes y cóncavas, como
las de Ranunculus, el agua de lluvia puede provocar la
autopolinización o, por salpicadura, la alogamia.
Cuando la polinización ocurre entre flores
distintas del mismo individuo se habla de geitonogamia,
situación común en especies con floración masiva, como el
lapacho (Tabebuia heptaphylla), el ibirá-pitá (Peltophorum
dubium), el palo borracho (Ceiba speciosa). Genéticamente es equivalente a la
autogamia.
Si la planta es monoica, como la de maíz,
por ejemplo, la geitonogamia es
obligada.
Peltophorum dubium,
ibirá-pitá |
Tabebuia heptaphylla,
lapacho |
Delonix regia,
chivato |
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